La coliflor es un alimento, que en principio, no suena muy bien (ese olor, alimento clave en las dietas de las abuelas, ...). Pero, un pequeño reto se me presentó cuando recibí una coliflor en el pedido de verduras. Pues bien, había que darle un poco de alegría.
Se cuece la coliflor (no más de cinco minutos) con laurel, lo que evita el clásico olor; al mismo tiempo se hace una salsa de nata y queso con un poquito de sal y pimienta negra. Finalmente se gratina con la salsa y pan rallado. La coliflor ya no es tan terrible!!
Prefiero coliflor cruda.
ReplyDeleteMe recuerda a mi madre, que la hacía hervida y luego la gratinaba en el horno.
ReplyDeleteEugenia Gil